Tenemos que partir de la base, que cada país, tiene sus creencias culturales y sus tradiciones, como Armenia, perteneciente a Asia, el cual posee, las tradiciones, más extrañas e injustas, desde los derechos de la mujer, hasta el daño, que pueden hacer a los niños.
Se considera a personas con esta patología, (síndrome de down), " seres impuros " y catalogados, como los que traen el deshonor, al apellido, abandonándolos en orfanatos, siempre que sean aceptados.
Independientemente de las creencias culturales, el amor de un padre/madre, hacia su hijo/a, ¿hasta que punto puede llegar?.
" Ruzan Badalyan ", nativa asiática, no tuvo compasión de su hijo recién nacido, intentó deshacerse de él, debido a la patología que presentaba, mientras que su padre.., " Samuel Forrets ", natural de Nueva Zelanda, se comprometió en cuidarlo, sin importarle su condición.
Pidió el divorcio, a la semana del parto, (21-01-2015), después de las grandes peleas que mantenían, debido a las creencias de la madre.
Samuel Forrets, realizó una campaña, para recaudar fondos y así, tener la posibilidad de criar a su hijo, con el apoyo de la familia y cuyas donaciones, alcanzaron la suma de, " 488.383 dólares ".
Su esposa recapacitó, al ver que se iba a quedar, sin esposo y sin su bebé, reencontrándose con Samuel y pidiéndole perdón, por las acciones que tuvo, con él y con su hijo.
Viendo que, las acciones y palabras de Badalyan, eran sinceras, aceptó, volver a incluirla en su vida y en de su hijo Leo, cuyo trayecto de convivencia diario, está dando su fruto, criando entre ambos a Leo.
Claro está, que el amor, " en este caso, de un padre "...., ¡¡ PUDO CON TODO !!.
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